8 tendencias en diseño de empaques que marcarán las siguientes décadas

El desarrollo sostenible es parte de la agenda actual que busca enfrentar los efectos negativos del cambio climático causado por el calentamiento global. Una de las acciones que se encuentran dentro de este marco es, sin dudar, la elaboración de productos y empaques que puedan ser reutilizados, reciclados o biodegradados. Las tendencias en diseño de empaques dan cuenta de este esfuerzo. 

Conoce las 8 tendencias en diseño de empaques en la era de la sostenibilidad

1. Menos plásticos de un solo uso 

La industria del empaque ha experimentado un cambio significativo en los últimos años. La creciente consciencia en torno al cuidado del medioambiente ha llevado a una drástica disminución de plásticos de un solo uso, sobre todo, en el contexto de las compras en línea, así como los hábitos de consumo sostenibles y respetuosos con la naturaleza. Se toma como base a la economía circular, la cual tiene como objetivo reducir los residuos y promover la reutilización. Son muchas las empresas que han optado por el cartón –véanse los packs de cerveza hechos con este material– o la utilización de pocas cantidades de práctico en la elaboración del empaque. 

2. Biomateriales para los empaques 

Los biomateriales han emergido como una solución innovadora en la industria del empaque. Estos materiales, derivados de fuentes naturales como el bambú, el bagazo de caña, las hojas de plátano, el almidón, entre otros, son no solo sostenibles, sino que también ofrecen una vida útil adecuada para cada tipo de envase. ¿Lo mejor de todo? Tras su utilización, se pueden, como se verá más adelante, compostar. 

3. Empaques compostables 

El compostaje también es tendencia. Esto ha hecho que se convierta en una opción muy valorada en el momento de diseñar empaques y etiquetas. En efecto, cada vez más marcas se decantan por elaborar empaques compostables, diseñados precisamente para descomponerse en condiciones específicas. Cuentan con la misma funcionalidad, desde luego, pero contribuyen con la reducción de la huella de carbono desde el proceso de producción hasta el momento en el que se desechan. El impacto en la gestión de residuos es significativo, ya que contribuye con la economía circular. No cabe duda de que las marcas que adoptan esta tendencia de packaging demuestran un compromiso genuino con la sostenibilidad y atraen a un segmento más amplio de consumidores preocupados por el medioambiente. 

4. Tendencia hacia el minimalismo 

El minimalismo es, hoy en día, la prueba de que el diseño se acerca cada vez más a lo esencial, tanto en funcionalidad como en apariencia. Esta tendencia se centra en la simplicidad de la presentación, por lo que elimina elementos innecesarios para destacar lo esencial. En este sentido, el minimalismo no solo aporta una experiencia estética más agradable, sino también refleja el trabajo de la marca en la elaboración de su imagen para el packaging. El efecto suele ser el esperado: gracias al minimalismo, la marca se presenta más compacta a través de la inclusión de cantidades justas de letras o imágenes. Así los empaques pueden enfatizar la autenticidad del producto. 

5. Nuevos y llamativos colores 

Las posibilidades del minimalismo encuentran potencial en el uso de los colores. Se trata de una tendencia que centra su atención en los colores llamativos y audaces, ya que el objetivo principal es bastante conocido: llamar la atención del consumidor. Estos colores reconocer el producto en cualquier anaquel, vitrina, tienda online o catálogo de productos. Además, hay que recordar que los colores se utilizan para provocar y evocar emociones para establecer conexiones más profundas con las marcas. Aunque las marcas trabajan con una amplia gama de colores, suelen preferir, desde hace algunos años, el blanco, el rojo, el amarillo, el azul y el verde, todos estos en sus diferentes tonalidades. 

6. Ilustraciones más atractivas 

Aunque las ilustraciones son parte del diseño de empaques, actualmente, las marcas optan por incluir propuestas más atrevidas y creativas, lo que implica la utilización de nuevas texturas, trazos, colores (pasteles o metálicos, por ejemplo) y detalles. La capacidad de comunicación de las ilustraciones, además, es indudable: cuentan una historia, transmiten los valores de la marca y contribuyen con resaltar los atributos de venta. En un contexto en el que los consumidores se enfrentan a una gran cantidad de diseños atractivos, las ilustraciones pueden contribuir con sobresalir en un mercado tan saturado visualmente. 

7. Empaques con imágenes compuestas 

Los empaques innovadores calan prontamente en la mente del consumidor. Tanto es así que los usuarios de redes sociales pueden compartirlos en plataformas como Instagram, Facebook, Twitter o TikTok. Se trata del diseño de empaques compuestos, que consisten en combinar varios elementos para lograr una sola imagen. Pero ¿cómo funciona esta propuesta realmente? Por ejemplo, dependiendo del tipo de envase, se puede partir incluir la sección de una imagen para que, cuando varios empaques se unan, conformen la totalidad de la imagen. Se suele hacer con animales, como vacas para los envases de leche, pero también con otros elementos relacionados con la marca. 

8. Smart packaging 

El avance tecnológico ha llevado al desarrollo del smart packaging o empaque inteligente. Dentro de las tendencias de diseño y tecnología, esta es quizá la más innovadora de todas, puesto que –gracias a códigos QR o realidad aumentada– los consumidores pueden acceder a nuevas y más eficientes plataformas, donde las marcas resaltan sus características frente a la competencia. De esta manera, se puede conseguir que millones de personas conozcan la marca incluso antes de haberla probado. 

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