Sostenibilidad tecnológica: qué es y tecnologías para alcanzarla

La tecnología es la innovación de nuestro tiempo. Como tal, aporta un conjunto de ventajas para mejorar procesos, reducir distancias, mejorar la educación y luchar contra el cambio climático. Precisamente, aquí se discurre en torno a la sostenibilidad tecnológica, un enfoque imprescindible para contrarrestar las consecuencias negativas del calentamiento global. En este texto, se aborda en qué consiste y se aportan ejemplos de tecnologías que pueden ayudar para reducir el impacto ambiental de las actividades humanas.

¿Qué es la sostenibilidad tecnológica? 

En la actualidad, la sostenibilidad es un concepto que abarca muchos campos relacionados, sobre todo, con las industrias. Precisamente, la industria tecnológica es una de ella, ya que está vinculada de manera directa con la utilización de recursos naturales para su producción y desarrollo. Sin embargo, al mismo tiempo que exige un trabaja más cuidadoso en lo que concierne a la explotación de metales, por ejemplo, también ofrece muchas oportunidades para lograr la sostenibilidad en otros ámbitos.  

Esto quiere decir que la sostenibilidad tecnológica engloba un conjunto de prácticas y tecnologías que minimiza el impacto ambiental, social y económico derivado del desarrollo y uso de estas mismas tecnologías. De esta manera, implica el desarrollo y uso de tecnologías que sean sostenibles a largo plazo, en lo que se considerar asimismo la eficiencia energética, la minimización de residuos, la utilización de materiales reciclables y, desde luego, atender al ciclo completo de los productos tecnológicos. 

Con todo, se trata de un enfoque que busca un equilibrio entre la protección del medioambiente y el avance tecnológico. Además, forma parte de la transformación digital que experimenta el mundo actualmente, lo que conmina a gobiernos e instituciones a promover un uso responsable y sostenible de las tecnologías para lograr eficiencia en muchos ámbitos relacionados. 

Agenda 2030 y sostenibilidad tecnológica 

La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, adoptada por las Naciones Unidas en 2015, es un plan de acción que busca erradicar la pobreza y garantizar la existencia de un mundo propicio para una vida digna. Sus principales valores son la participación de todos, el cuidado del planeta, la consecución de la paz, la prosperidad y, como se dijo, poner fin al hambre y la pobreza.  

La sostenibilidad tecnológica cumple un rol fundamental en este contexto. De hecho, se reconoce la importancia de la tecnología para un desarrollo sustentable. Es así como las infraestructuras resilientes, la industrialización sostenible e inclusiva, así como el fomento de la innovación forman parte de las herramientas para alcanzar el crecimiento económico, la reducción de las desigualdades y la protección del medioambiente. 

Así, la sostenibilidad tecnológica permite optimizar el uso de recursos, aminorar la contaminación y contrarrestar la producción de residuos en grandes cantidades. Gracias a las innovaciones tecnológicas, sus servicios y los dispositivos que pone a disposición, la Agenda 2030 encuentra en la sostenibilidad tecnológica un catalizador para el cumplimiento de sus principales objetivos. 

Ventajas de la sostenibilidad tecnológica 

Optimización del uso de recursos 

La sostenibilidad tecnológica contribuye directamente con la optimización del uso de recursos, ya que las tecnologías sostenibles son eficientes en términos de energía y recursos. Esto permite reducir el consumo y minimizar residuos. 

Reducción de la pobreza 

Asimismo, puede contribuir con la reducción de la pobreza al facilitar el acceso a servicios como la energía, la educación, el agua y crear también oportunidades de empleo en sectores tecnológicos emergentes. 

Fortalecimiento de la economía circular 

Se debe resaltar también el lugar de la sostenibilidad tecnológica en la economía circular, la misma que busca minimizar el uso de recursos y contribuir con el reciclaje, la reutilización y aprovechamiento de la vida útil de todos los productos. Las tecnologías pueden facilitar la transición hacia una economía circular sólida a través del diseño y creación de productos susceptibles de reciclaje. 

Creación de puestos de trabajo 

Sin lugar a dudas, la tecnología y sus avances han supuesto la creación de puestos de trabajo. Al impulsar el desarrollo en nuevos sectores y generar nuevas herramientas, muchas empresas centran actualmente sus esfuerzos para lograr un uso eficiente y sostenible de la tecnología. Así, se generan puestos de trabajo para cubrir un sector que ya no es emergente, sino todo lo contrario: se trata de un ámbito de estudio y trabajo que es el protagonista del siglo XXI. 

Ejemplos de tecnologías para la sostenibilidad 

Inteligencia artificial (IA) 

La inteligencia artificial puede contribuir a la sostenibilidad en múltiples formas. Por ejemplo, puede utilizarse para optimizar los procesos de producción y reducir el consumo de recursos, para predecir y gestionar los impactos ambientales, o para desarrollar soluciones innovadoras para problemas de sostenibilidad. 

Paneles solares 

Son, hoy en día, una tecnología clave para la sostenibilidad energética. Al convertir la energía solar en electricidad, permiten reducir la dependencia de los combustibles fósiles y disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, son una fuente de energía renovable y limpia que puede ser utilizada en diversas aplicaciones, desde la generación de electricidad para hogares y empresas hasta la alimentación de vehículos eléctricos. 

Trámites electrónicos 

La digitalización de los trámites y servicios puede contribuir significativamente a la sostenibilidad. Al reducir la necesidad de papel y de desplazamientos físicos, los trámites electrónicos pueden minimizar el consumo de recursos y las emisiones de carbono. La utilización de firmas electrónicas, certificados digitales o sistemas de clave permanente para la identificación telemática es crucial para disminuir el uso, por ejemplo, de papel o sistemas de transporte. 

Migración a la nube 

El cloud computing es una tecnología que, desde su implementación, ha contribuido directamente con la sostenibilidad. Al permitir el acceso a datos y aplicaciones a través de internet, permite la gestión de información a través de servidores y servicios como los ofrecidos por AWS. Así, se reduce la huella de carbono asociada a otros procedimientos. Hay que resaltar, asimismo, que las empresas e instituciones forman parte de la sostenibilidad, por lo que la migración a la nube maximiza la utilización de recursos y permite una actividad empresarial sostenible.

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