Sistema de calefacción industrial: qué es, cómo elegirlo y principales tipos

Un sistema de calefacción industrial eficiente es un componente imprescindible en todas las empresas o fábricas que cuentan con almacenes, naves industriales u otro tipo de espacios similares. Debido a que permite mantener una temperatura regular en función del espacio elegido, puede contribuir con un correcto trabajo y desenvolvimiento óptimo de procesos. De ahí que, desde el diseño de las naves, sea necesario considerar qué sistema elegir. Esto se aborda en el siguiente texto.

¿En qué consiste la calefacción industrial? 

En el ámbito industrial, la calefacción es un elemento imprescindible para mantener una temperatura adecuada. Esto se presenta, en ocasiones, como un reto, puesto que los espacios que deben calentarse poseen dimensiones mayores en comparación con otros, como las habitaciones de casas u oficinas. Así, la calefacción industrial busca mantener el calor en espacios grandes, como una nave industrial, un almacén o un taller. 

Los sistemas comúnmente utilizados para esto buscan mantener un ambiente de trabajo óptimo para mejorar la productividad, sobre todo en lo que concierne al trabajo de los empleados y a los procesos productivos en sí mismos. Si no se gestionara correctamente la climatización de estos espacios, podrían surgir problemas en los niveles mencionados anteriormente. La salud, por tanto, es la base para un correcto desempeño. 

¿Cómo elegir el sistema de calefacción adecuado? 

Como se ha mencionado, la calefacción de un espacio industrial presenta otras exigencias frente a la climatización de ambientes de tamaño reducido (por ejemplo, una vivienda). Es así como se deben considerar determinados factores para elegir el tipo de calefacción ideal según las especificaciones del espacio industrial.  

Entonces, se toman en consideración la altura de los techos y el volumen del espacio. Estos son importantes porque se debe buscar la manera de que el calor se distribuya homogéneamente en las partes inferior y superior de la nave o almacén. De ahí la importancia del sistema de calefacción.  

Ahora bien, las temperaturas mínimas para las naves industriales pueden variar en función del tipo de actividad que se realice en ellas. Por ejemplo, para las naves de producción, se recomiendan temperaturas entre los 16 y los 21 grados centígrados, mientras que para las naves de almacenamiento y carga/descarga pueden ser inferiores. 

En consecuencia, no solo se consideran las dimensiones de las naves, sino también los productos y los procedimientos que tienen lugar en ellas. 

Características de los sistemas de calefacción industrial 

Potencia 

La potencia es un aspecto clave, ya que determina la capacidad del sistema para calentar un espacio determinado. Esta es la razón por la que los sistemas de calefacción poseen diferentes potencias para adaptarse así a variados tamaños y tipos de espacios industriales. Si se busca una adecuada temperatura, así como ahorro energético, el sistema debe elegirse tras evaluar los requerimientos del espacio. 

Dimensiones 

Junto con la potencia, se consideran las dimensiones del sistema de calefacción. De hecho, para espacios grandes, podrían necesitarse sistemas más grandes o, en todo caso, múltiples unidades para cubrir todo el espacio. De menor o mayor tamaño, los sistemas de calefacción industrial deben permitir una adecuada estratificación del calor, sobre todo cuando se cuenta con espacios altos. 

Seguridad 

En función del espacio o actividad que se realice en él, los sistemas de calefacción deben brindar seguridad para sus trabajadores en todo momento. Para ello, se utilizan no solo los sistemas de mayor potencia o dimensiones, sino también aquellos que permitan calentar espacios y proporcionar calor constante de manera segura, tanto en el funcionamiento del sistema como en la manipulación del mismo. 

Principales sistemas de calefacción industrial 

Calefacción radiante 

Estos sistemas operan a través de la emisión de calor que se irradia desde diferentes posiciones de la nave industrial. Este método de calefacción se caracteriza por utilizar, en la mayoría de los casos, un tubo radiante, el cual, gracias a la radiación infrarroja, puede generar calor. Se trata de un método de calefacción que especialmente útil en naves industriales de gran altura, lo que permite un menor consumo energético al distribuir el calor de manera más eficaz sin afectar la calidad del aire. 

Pantallas cerámicas 

Estas pantallas utilizan elementos cerámicos para generar y emitir calor. Son especialmente eficientes en el consumo energético y se utilizan ampliamente en naves industriales donde se requiere una distribución uniforme y precisa del calor. Su capacidad para mantener la temperatura estable las convierte en una opción preferida para espacios donde se necesitan condiciones térmicas constantes. Se caracteriza por utilizar gas para generar calor radiante. 

Calefacción de gasoil 

Los sistemas de calefacción de gasoil funcionan mediante la quema de este combustible en un sistema de combustión. Aunque su instalación puede ser más compleja y su mantenimiento requiera mayor atención, esta opción es muy popular debido a su alta capacidad para proporcionar calor, incluso en condiciones en las que se requieren altas temperaturas. Según las características del sistema, se realiza la combustión directamente o también combustión indirecta con el objetivo de distribuir el calor de forma rápida. 

Calefacción de aire caliente 

Este tipo de calefacción se basa en el principio de forzar la circulación de aire frío a través de un sistema de calefacción, calentándolo y redistribuyéndolo por todo el espacio. Los generadores de aire caliente, como calentadores industriales, son eficaces y rápidos, por lo que son especialmente útiles para calentar grandes espacios en poco tiempo

Calefacción eléctrica 

Estos sistemas transforman la energía eléctrica en calor de manera eficiente. Aunque el consumo energético puede ser considerable, la calefacción eléctrica ofrece un ambiente de trabajo confortable y seguro al eliminar la necesidad de combustión y su consiguiente riesgo.

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