¿En qué consiste una representación arquitectónica? Consejos para exponerla

 

En el mundo, existen muchos edificios que resaltan por su diseño arquitectónico de vanguardia. Estructuras “imposibles”, materiales ecoamigables, innovación y tecnología, por ejemplo, se unen para dar nacimiento a íconos arquitectónicos como el Burj Khalifa (Emiratos Árabes Unidos) o el Museo Guggenheim (España).

Pero, antes de construirlos, se requiere cumplir con una serie de requisitos tanto técnicos como visuales. Se parte de la conceptualización; luego, se aporta una representación arquitectónica; por último, se aprueba el proyecto y se inicia la construcción. Aquí te hablamos sobre la presentación visual de los detalles del proyecto. 

Proceso de conceptualización y representación arquitectónica 

Los proyectos arquitectónicos, como ocurre con las obras de arte, surgen de un proceso de conceptualización en el que se define no solo la idea base, sino también las primeras representaciones de esta. Así, el concepto central se sitúa como la guía del diseño y la colaboración entre especialistas, clientes y demás involucrados. Se plantean preguntas vinculadas con la funcionalidad del espacio, la ubicación de la construcción, los presupuestos básicos de la ejecución del proyecto, las expectativas del cliente, las herramientas y métodos de representación, entre otros. 

Aunque en apariencia este proceso únicamente técnico, implica un profundo ejercicio creativo del arquitecto o estudio arquitectónico, ya que la premisa rectora es satisfacer las necesidades básicas del producto final. Se investigan casos similares, se evalúan contingencias y se adecuan las propuestas creativas a los aspectos de diseño, ingeniería y materiales. En pocas palabras, se sigue una metodología que deriva, en sus fases ulteriores, en la representación arquitectónica a través de láminas, maquetas y otros medios visuales que ilustran en detalle la propuesta. 

Precisamente, esta última va más allá de la ilustración gráfica: se trata de una herramienta comunicativa que transmite el concepto original y la esencia del proyecto. Esta representación es imprescindible para la que los interesados comprendan no solo la estética del proyecto sino también su funcionalidad, sus aspectos innovadores, su integración con el entorno y la propuesta creativa. En definitiva, la conceptualización y la representación arquitectónica son procesos interconectados que forman la columna vertebral de cualquier proyecto arquitectónico exitoso. 

Tipos de representación arquitectónica 

Elaboración de lámina 

Las láminas son una técnica tradicional que aún prevalece como método de representación gráfica. Se caracterizan por combinar dibujos, esquemas, gráficos y otros elementos necesarios para ilustrar y transmitir los aspectos claves de un proyecto. Pueden incluir elevaciones, perspectivas, planos y comentarios que operan como leyendas y descripciones. 

Elementos y detales de ambientación 

Estos detalles –presentes en láminas y maquetas– incluyen texturas, cielos, colores, iluminación, vegetación, sombras, mobiliario y escala humana para visualizar cómo se integrarán todos estos elementos no solo en el edificio, sino también en el contexto. Como resultado, se tienen una idea de cómo se verá el conjunto en la realidad. 

Dibujo y composición de planos 

Esta técnica implica la creación precisa de planos técnicos, que son esenciales para el entendimiento detallado del proyecto. Estos productos proporcionan una vista a escala del diseño, incluyendo la disposición espacial, la distribución de habitaciones y los detalles constructivos, que pueden diseñarse en Revit, por ejemplo. Estos son indispensables para la fase de construcción y para asegurar que todas las partes involucradas en el proyecto tengan una comprensión clara del diseño propuesto.

Maquetas 

También se encuentran las maquetas. De relevancia innegable, este tipo de representación gráfica ofrece una vista tridimensional y física del proyecto. Por sus características, acude a escalas para permitir una comprensión espacial y volumétrica más detallada. Se utilizan elementos de ambientación arquitectónica, así como otros detalles para representar cómo sería el producto final en la realidad

Tendencias en representación arquitectónica 

Metodologías BIM 

El modelado de información para la construcción (BIM, Building Information Modeling) es más que una simple herramienta de diseño 3D; se trata de una metodología integral que facilita la colaboración y la toma de decisiones durante todo el proceso de diseño y construcción. BIM ofrece una comprensión detallada y en tiempo real del proyecto, por lo que permite ajustes y optimizaciones continuas. 

Render 

El render permite una versión visual de alta calidad de bocetos, dibujos u otras representaciones. Se requieren softwares especializados, como Endscape, para realizar estos modelos, cuya función es brindar una imagen realista de los proyectos antes de su aprobación total y, por lo tanto, su construcción. Para obtener el render, se recurre al modelado 3D.  

Realidad aumentada 

La realidad aumentada (AR, augmented reality) combina elementos virtuales con el entorno real. Al aplicarla en los renders arquitectónicos, se logra una representación visual altamente realista. Por eso provee una visualización inmersiva del proyecto en su entorno real, lo que permite explorar detalles arquitectónicos de manera interactiva; asimismo, facilita la colaboración en el diseño. 

¿Cómo presentar una representación arquitectónica?

Elaborar un buen briefing 

Este documento recoge la información necesaria para el desarrollo del proyecto, de modo que permite al cliente conocer la propuesta del arquitecto y, en consecuencia, brindar acotaciones o recomendaciones sobre esta. Se presentan datos sobre ambientes, diseño de zonas, exteriores, materiales, entre otros, lo que facilita calcular los honorarios del profesional. Para que la presentación sea efectiva, se requieren habilidades de comunicación, escucha activa y capacidad de negociación. 

Realizar un anteproyecto 

El anteproyecto, por su parte, define y presenta las ideas iniciales del proyecto. ¿Qué es lo que incluye? Este documento presenta bosquejos derivados de la conceptualización, las zonas de construcción, dimensiones de los espacios, planos de ubicación, elevaciones, azoteas, entre otros. Con todo esto, se analiza la viabilidad técnica, económica y legal, así como la presentación de las ideas al cliente. 

Elaborar el proyecto ejecutivo 

Tras aprobar el anteproyecto, se desarrolla el proyecto ejecutivo, que incluye planos técnicos detallados, especificaciones de construcción y cálculos estructurales. Este paso también implica la planificación y presupuestación detallada de la obra, la gestión de permisos y licencias necesarios, y la selección de proveedores y contratistas. 

Comunicar la representación arquitectónica 

Una comunicación efectiva es clave en todas las etapas del proyecto. Esto incluye mantener informado al cliente sobre el progreso y los cambios, y presentar claramente los aspectos del diseño. Utilizar herramientas visuales como renders, maquetas y presentaciones interactivas puede ser muy efectivo para facilitar la comprensión y el involucramiento del cliente. 

Resolver dudas de los clientes 

Finalmente, es esencial abordar y resolver cualquier duda o inquietud que el cliente pueda tener durante el proceso. Esto ayuda a construir una relación de confianza y asegura que el resultado final satisfaga sus expectativas y necesidades. 

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