¿Cuál es la importancia de la gestión cultural?

La gestión cultural es una pieza clave para el desarrollo local y comunitario. Esto se explica por las diversas estrategias que aplican sus profesionales para llevar la cultura a todos y todas a través de eventos y espacios específicamente creados para la difusión de diferentes manifestaciones culturales. Entonces, ¿cómo se explica la importancia de la gestión cultural? En lo que sigue, se mencionan seis puntos responden a esta pregunta.

La importancia de la gestión cultural en 6 acciones

Uno. Difunde valores y conocimientos 

Uno de los primeros puntos que explica la importancia de la gestión cultural en la sociedad actual es, desde luego, la difusión de valores, creencias y conocimientos de diferentes pueblos y sociedades. En este sentido, las acciones y estrategias desarrolladas dentro de su campo de actuación permiten la reproducción social de la cultura, la cual consiste –más allá de la performance de sus elementos– en la transmisión de aquel bagaje de una generación a otra. Podría decirse que, entonces, la gestión cultural impacta en la memoria local, regional o, incluso, nacional, en tanto promueve no solo la visibilidad de diferentes expresiones culturales, sino también su valoración, aceptación y, desde luego, reconocimiento como parte de una riqueza intangible, pero no por eso menos importante. Después de todo, los pueblos son cultura, cultura viva. 

Dos. Fomenta la preservación de cultura 

Siguiendo lo anterior, la gestión cultural es un factor ineludible dentro de la preservación de diferentes manifestaciones culturales, entre las que se encuentran las artes visuales, artes performáticas y las artes literarias, todas ellas producidas de manera individual o colectiva. En pocas palabras, se trata de lo que, hoy en día, se denomina “artes culturales”. Pero ¿en qué consisten estas? En términos simples, son aquellas expresiones artísticas que pueden ser incluidas dentro de programas de difusión tanto para la promoción de las culturas locales como para la promoción de la interculturalidad en contextos en los que individuos de diferentes culturas conviven. Así, las exposiciones, las convenciones, las puestas en escena, las lecturas de obras literarias, entre otros, permiten la generación de espacios para la revalorización y conservación de la cultura. 

Tres. Permite el reconocimiento de la diversidad 

Vistos los puntos de la difusión y preservación de manifestaciones y productos culturales, la gestión cultural ofrece la oportunidad de fomentar el reconocimiento de la riqueza y diversidad cultural de los pueblos, así como las propuestas artísticas individuales, enmarcadas o no dentro de lo tradicional. Así, los gestores culturales comprenden que todo lo que se encuentra dentro de la sociedad forma parte del patrimonio cultural, lo que a su vez implica la posibilidad de incluirlo en programas para fomentar la inclusión social. Entonces, con la cultura como puente entre las personas, se puede combatir la xenofobia, la discriminación y el racismo, del modo tal que se puede promover la tolerancia, la empatía y el reconocimiento mutuo sobre la base de la diferencia, signo de riqueza. De ahí la importancia de la gestión cultural. 

Cuatro. Promueve la cohesión social 

Aunque la cohesión social pueda entenderse como un estado, se trata al mismo tiempo de un proceso en el que la interacción y la cooperación entre diferentes grupos culturales es posible, sobre todo en contextos pluriculturales y plurilingües. Considerando, entonces, el reconocimiento de la diversidad, los miembros de las comunidades pueden entender que en la diferencia se encuentra la posibilidad de enriquecimiento mutuo. Esto, en términos culturales, permite la adopción o consideración de variadas formas de comprender el mundo que, en vez de ser opuestas, pueden ser complementarias. Si uno de los resultados puede ser la tolerancia, puede ocurrir también la solidaridad, la cooperación y la capacidad de solventar desafíos comunes. Se trata de, entonces, un factor escala que emana del patrimonio local hacia niveles mayores. 

Cinco. Genera espacios para el arte 

Ahora bien, tal y como se ha mencionado antes, la gestión cultural genera espacios para la creación, difusión y preservación del arte. Ya sean físicos o virtuales –sí, porque actualmente Internet permite todo tipo de eventos culturales–, estos espacios permiten a los artistas exhibir su trabajo y promocionarlo. Esto forma parte de una iniciativa cada vez más común: promover la innovación, el rescate de la cultura tradicional y el desarrollo cultural a través del arte. Así, los beneficios no solo se perciben en el nivel cultural, sino también en el económico, ya que los eventos –como las convenciones de danzas o festivales de música– facilitan la promoción de carreras artísticas. Con todo, la gestión cultural se erige como una herramienta poderosa para la promoción y el apoyo al arte, lo que permite a las culturas y a sus artistas expresarse y profesionalizarse a través del arte. 

Seis. Crea una sociedad cultural 

Por último, otro aspecto que explica la importancia de la gestión cultural es la creación de una sociedad cultural. Esto significa la formación de una sociedad que respeta, valora e interioriza la cultura como parte fundamental de su vida cotidiana; además, la inserta como elemento fundamental para las relaciones interpersonales que pueden surgir en contextos plurales. Entonces, al discurrir en torno a las sociedades culturales, se hace referencia a la identidad cultural, la tolerancia, la riqueza, el sentido de permanencia, la unidad y la comprensión, todo sobre la base de la colaboración y participación. La cultura está en todas partes. La gestión cultural la hace tangible, visible y accesible, de ahí que los gestores culturales sean tan importantes en la actualidad. 

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